Mascarillas caseras para rejuvenecer tu rostro.
La luminosidad, la suavidad, las arrugas y el color de nuestra piel dependen de muchos factores (ambientales, genéticos, psicológicos, etc… ) y la alimentación es uno fundamental. Beber una cantidad diaria de 2 litros de agua al día. Cuidarse del sol. Evitar el tabaco y el alcohol en exceso son hábitos necesarios para mantener nuestra piel humectante y saludable. Además, existen algunos alimentos que no sólo nos benefician por sus propiedades alimenticias, sino que aplicados en cremas, mascarillas o al natural directamente, tienen efectos muy positivos sobre nuestra piel, especialmente en el rostro.
Cada piel es única; según la cantidad de grasa y la textura que presenta las pieles pueden clasificarse en tres grupos. Las secas son aquellas que por falta de humedad, tienden a formar arrugas tempranamente (a partir de los 25 años). Las pieles grasas las que se caracterizan por la acumulación excesiva de sebo. Estas pieles son las más propensas al acné, los granos o las espinillas. Las mixtas se componen de una zona grasa en la frente, nariz y barbilla (conocido como zona T) y el resto del cutis es normal.
La miel también resulta un exfoliante natural al mismo tiempo que suaviza rostro.
El pepino es muy recomendable como ingrediente principal para elaborar mascarillas caseras gracias a su poder hidratante.
- Pepino, sencillo cosmético natural.
El pepino forma parte de un basto número de cremas hidratantes para el rostro, lociones de limpieza y exfoliantes. Uno de los alimentos más usados en la cosmética gracias a todos los nutrientes y agua que aporta a la piel. Aplicado externamente en mascarillas o al natural cortado en rodajas, consigue hidratar y suavizar la piel y devolverle su frescura natural.
Su poder hidratante o hace muy recomendable para pieles que han sufrido una exposición solar demasiado prolongada, dermatitis y quemaduras no solares, acné y pieles irritables en exceso. Dentro de sus propiedades, la más cosmética es la capacidad del pepino de reducir las arrugas. Una de las mascarillas caseras más recomendable y económica para realizar una limpieza a fondo es: mezcla un pepino triturado con medio yogur y tres cucharadas de miel. Extiendes la mezcla y dejas actuar 20 minutos, después retiras con agua tibia. Esta mascarilla natural hidrata y tonifica la piel además de retirar impurezas y el exceso de grasa.