Cataluña sería totalmente insostenible económicamente a pesar que hayan economistas que estén intentando darle la vuelta, los investigadores internacionales confirman que Cataluña tendrá cerrados los mercados de deuda mayorista.
La falsa viabilidad económica de Cataluña al descubierto.
Cada hora se marchan 20 empresas de Cataluña.
Fuentes del Gobierno de España manifestaron meses atrás que en caso de una Cataluña independiente, la Generalitat no podría ni pagar las nóminas de los funcionarios ni pagar a las farmacias. También los bancos de inversión y las agencias de rating han advertido que una Cataluña independiente sería totalmente inviable económicamente. Moody’s, la agencia de calificación de riesgo que realiza la investigación financiera internacional, advirtió que hasta que no se rebaje la incertidumbre en esta comunidad autónoma, Cataluña tendrá cerrado el acceso a los mercados de deuda mayorista. Asimismo, Europa también se ha manifestado en torno al panorama político y económico que se plantearía ante una hipotética República Catalana, poniendo en conocimiento que esta no podría beneficiarse de la estabilidad del euro en referencia a la circulación de mercancías ni tampoco estaría bajo la protección económica del Banco Central Europeo.
A pesar de todos estos avisos tanto de dentro de nuestras fronteras como de fuera de nuestro país, la hoja de ruta hacia una Cataluña independiente sigue su curso. Algunas voces afines al secesionismo como la de Oriol Amat, catedrático de Economía Financiera de la Universidad Pompeu Fabra, han asegurado que » las cuentas de la Generalitat pasarían de déficit a superávit», además añade que «el rating pasaría a ser mucho mejor que el del Estado español». Estas declaraciones que presentan una Cataluña totalmente viable económicamente, distan mucho del contenido perteneciente a los documentos incautados por la Guardia Civil en los registros del pasado 20 de septiembre. Estos hallaron un documento manuscrito en el despacho del secretario de Hacienda, Lluís Salvadó, que decía que ante un escenario de confrontación con el Estado español, se debía » analizar si podemos afrontar el primer pago de nóminas» o sostener la liquidez más allá del mes de diciembre y » el funcionamiento básico de la administración catalana». Se desconoce al posible autor de este manuscrito, pero consta que lo envió el director de Patrimoni de la Generalitat, Francesc Sutrias a Salvadó. En este manuscrito se ofrecen diversas propuestas para poder solventar esta situación como la emisión de bonos patrióticos como una de las financiaciones alternativas, reforzar la recaudación a base de impuestos al ciudadano y a todas las empresas e, incluso, poner a salvo las cuentas del Govern con su traslado a París.
Desde la consellera d’Economia, que dirige Oriol Junquetas, se ha descartado hacer ningún tipo de declaración sobre la documentación incautada por la Guardia Civil.
Se ha de recordar que Cataluña ya hizo uso de los bonos patrióticos cuyo dinero fue devuelto gracias al Fondo de Liquidez Autonómico( FLA). Este producto que el Govern de la Generalitat emitió como fórmula de refinanciación ante el cierre de los mercados internacionales acusó aún más la deuda de la Generalitat. Cataluña es la región más beneficiada por el FLA (Fondos de Liquidez Autonómicos) puesto que entre el año 2012 y hasta inicios del 2017 ha recibido alrededor de 70.000 millones de euros de una manera continua. Otra de las propuestas que figuran en estos documentos incautados es la de «activar un plan de ajuste de gasto del Gobierno catalán y atrasar los pagos a proveedores». La Generalitat cerró el ejercicio del 2016 generando un 99’4% de deuda, y , más de la mitad corresponde a deuda con proveedores sanitarios( laboratorios farmacéuticos, oficinas de farmacia, proveedores de tecnología sanitaria, etc…). Desde el año 2011, año en que empezaron los impagos se han cerrado más de 25 farmacias en Cataluña y se ha llevado a cabo un fuerte recorte presupuestario en sanidad por parte de la Generalitat.
En caso de declararse unilateralmente la independencia la automovilística SEAT y la constructora FCC abandonarían Cataluña.
Teniendo en cuenta el traslado masivo de sedes sociales y fiscales en los últimos días, y de seguir en su empeño en declarar la independencia de Cataluña aumentaría el reguero de empresas salientes de esta comunidad autónoma poniendo de manifiesto la capacidad recaudatoria de la Generalitat, siendo inferior a la prevista. Esta podría perder con la fuga de empresas más de 1.200 millones en recaudación.
Ante el desafío independentista y para evitar que dinero público vaya destinado al proceso secesionista, este pasado mes de septiembre el Estado español tomó el control de las cuentas catalanas que afectan a nóminas de funcionarios, educación, el coste de sanidad, la protección civil, ayudas y subvenciones a las familias y dependencia.