La salud visual es algo que se suele pasar por alto, tanto si se parte con algún tipo de discapacidad visual, como la miopía, como si se tiene una buena vista. Sin embargo, el ritmo frenético del día a día hace que no nos demos cuenta de que puede haber pequeñas faltas de visión que comienzan, por un motivo u otro.
Revisar periódicamente la vista es fundamental para mantener una correcta salud visual, ya que la constante exposición a las pantallas, la edad y algunos indicios que se pasan por alto, pueden ser factores que indican problemas con la vista. Para poder estar seguro, es recomendable acudir a una de las ópticas en Barcelona una vez al año, o cada dos años, para cuidar nuestra vista.
Según el Libro Blanco de la Visión en España, en este país hay unos 12 millones de personas con miopía. Los casos diagnosticados deben acudir periódicamente al óptico u optometrista para comprobar que continúan con el mismo nivel; así como la gente que no tiene ninguna deficiencia, debería acudir una vez cada dos años antes de los 40, y podría empezar a ir anualmente a partir de este momento. Aquí te explicamos los casos en los que acudir a revisión y los síntomas para tener en cuenta.
La vuelta a la rutina y las pantallas
Después del verano, es posible que el regreso a la rutina y a un ritmo más rápido, con una mayor exposición a los monitores, te hagan notar alguna deficiencia en la vista. Y es que, si bien las pantallas no dañan la vista directamente, es algo que hay que tener en cuenta a la hora de trabajar. Por ejemplo, normalmente el ojo deja de parpadear delante del monitor, algo que no renueva la película lagrimal y puede ser pernicioso a la larga. En estos casos, es importante hacer descansos de la vista en intervalos de 20 minutos, mirar a otro punto y parpadear durante 20 segundos.
En cualquier caso, esta vuelta a la rutina puede ser un gran impacto para los ojos. Un buen momento para una revisión y comprobar que todo está en buen funcionamiento.
Con la edad, los ojos desarrollan «vista cansada«, siendo algo negativo para el día a día, la conducción o el trabajo. Por este motivo, a partir de los 40 años es fundamental revisar la vista. Al mismo tiempo, si ya se tiene miopía o hipermetropía, es esencial revisar que la afección no aumenta.
Síntomas habituales que se pasan por alto
Por otro lado, el cuerpo y las retinas pueden dar pistas del desgaste de la vista, si bien a veces se pasan por alto ciertos síntomas. Si el ojo llora de forma espontánea y relativamente habitual, significa que el ojo es incapaz de renovar su película lagrimal de forma natural, lo que se puede deber a un desgaste de la vista en caso de problemas.
Al mismo tiempo, la rojez en el ojo, la visión doble o la sensación de que algo se ha metido son otros síntomas de algún tipo de dificultad en la vista.
Acudir periódicamente al óptico o al oftalmólogo es fundamental para seguir manteniendo una buena salud y una óptima salud visual. Porque la calidad de la vista influye en la calidad del día a día.