El Circo Raluy Legacy vuelve a Barcelona para alegrarnos la Navidad.
El circo presenta en Barcelona su nuevo espectáculo, un tributo al circo clásico que combina tradición y modernidad. “Un
El Circo Raluy desembarca en Barcelona con un espectáculo que combina la tradición y el espíritu del auténtico circo con las últimas innovaciones técnicas y una puesta en escena muy cuidada. Un show que como reza su claim es un espectáculo para adultos que ningún niño debería perderse. Después de siete meses de gira y tras ofrecer su nuevo show a más de 50.000 espectadores, el Circo Raluy llega a Barcelona encabezado por Luis Raluy y con números innovadores de algunas de las figuras más clásicas de las artes circenses como acróbatas, clowns o equilibristas. Con su apuesta por el clasicismo y la modernidad, el Circo Raluy pone de manifiesto la devoción familiar por mantener en evolución una tradición que ya atañe a cinco generaciones.
La combinación entre la tradición y la modernidad del Circo Raluy Legacy le hace mágico y diferente a los demás.
El espectáculo cuenta con un elenco de artistas internacionales y este año con una estrella invitada de alto voltaje: el campeón del mundo de freestyle futbolístico Iya Traoré que hará disfrutar a todos con su sorprendente actuación. El “Circo
Raluy Legacy” combina la seña de identidad que acompaña a la familia desde sus inicios, como sus reformados carruajes de principios de siglo o el “hotel con ruedas”, con una
Este año la novedad viene de la mano de la inauguración de las cenas-espectáculo, una nueva manera de disfrutar de la experiencia, a pocos centímetros del epicentro del espectáculo.
Te dejamos la entrevista a una de las máximas y conocidas de la familia Niedziela Raluy la acróbata que dejó aparcado el circo un tiempo para adentrarse en Gran Hermano 16 y que posteriormente volvió al mundo que más le apasiona, el Circo Raluy y su familia. Aprovechamos para dejarte nuestro Youtube en el que hicimos la presentación de la entrevista.
El Legado Circense de los Raluy: Una Tradición que Define el Arte del Espectáculo
En el amanecer del siglo XX, la pequeña aldea de Fonz en Huesca vio partir a uno de sus hijos más intrépidos, Francisco Raluy. Con un repertorio de malabares, acompañado solamente de una cabra y un oso, Francisco recorría aldeas diminutas, presentando espectáculos improvisados sin carpa ni caravana. Junto a su esposa, se aventuraban durante los meses cálidos, y al llegar el invierno, se refugiaban en el lugar donde les sorprendía el frío, esperando pacientemente el retorno del buen tiempo.
El destino los encontró en Carcasona, Francia, durante el invierno de 1911, donde nació su hijo Luis Raluy Iglesias el 11 de febrero. Este evento marcó un punto de inflexión para Francisco, quien comenzó a ver un futuro distinto, ahora con una familia a su cargo.
Al regresar a España, la familia se estableció en Sant Adrià de Besos, cerca de Barcelona, donde Luis creció inmerso en las historias de aventuras de su padre y desarrolló una pasión por el circo que definiría su vida. Desde joven, Luis se adentró en el mundo de la gimnasia y practicaba en las playas de la Barceloneta, donde su habilidad para las acrobacias atrajo la atención de Juanito Siles, quien buscaba a alguien para completar su trío acrobático.
Luis siguió los pasos de su padre y pronto se destacó en el mundo del circo, uniéndose a famosos tríos de barristas y viajando por Europa entre las dos guerras mundiales. Al estallar la Segunda Guerra Mundial, Luis encontró refugio de nuevo en Sant Adrià de Besos, Cataluña.
En esos años, el London Bar de Barcelona se convirtió en un hervidero de artistas y circenses. Allí, Luis frecuentaba y compartía historias, aprendía técnicas y soñaba con grandes espectáculos. Este lugar se transformó en un punto de encuentro esencial para la comunidad artística, facilitando a Luis contratos con los principales circos de la época.
Durante sus giras, Luis conoció a Marina Tomàs Jorba, quien se convertiría en su esposa. Juntos tuvieron hijos que nacieron en el corazón del hogar familiar en Sant Adrià, perpetuando la tradición circense.
Con el tiempo, Luis se innovó y creó actos como el de Hombre Bala, utilizando un cañón de aire comprimido de su propia construcción, y se destacó en los más renombrados circos de Europa, como el Cirque d´Hiver en París y el Chipperfields Circus en el Reino Unido.
La década de 1960 trajo consigo nuevos horizontes para los Raluy, quienes embarcaron en una gira mundial con el Circo Brasil. Viajaron desde Madagascar hasta Hong Kong, dejando huella con su arte en cada parada.
Desafortunadamente, las inundaciones de 1963 en Barcelona trajeron consigo la pérdida de todas sus propiedades y ahorros, un golpe duro para la familia. Sin embargo, Luis no se dejó vencer por la adversidad y continuó innovando, incluso inventando el Triple Salto Mortal en Automóvil, un acto que reviviría el interés y la admiración del público y mantendría llenos los asientos en los circos durante años.
La historia de los Raluy es un testimonio del espíritu indomable del circo, un legado de perseverancia, innovación y pasión que continúa inspirando a generaciones.
Actualización de Navidad 2024-2025
La magia del circo en Navidad: un plan inolvidable para toda la familia. La Navidad es una época mágica para compartir en familia, y pocas experiencias capturan mejor esa magia que una visita al circo clásico. Bajo la gran carpa, los colores, las luces y la música transportan a niños y adultos a un mundo de fantasía y asombro, convirtiendo el frío del invierno en pura calidez.
Estas navidades 2024-2025 podrás disfrutar el espectáculo del Circo Raluy en la localidad barcelonesa de Sant Cugat. El circo clásico es un espectáculo que combina tradición y sorpresa. Desde los malabaristas que desafían la gravedad hasta los trapecistas que dejan sin aliento con sus acrobacias, cada actuación tiene el poder de despertar emociones únicas. Además, los payasos nos regalan carcajadas inolvidables, recordándonos que la risa compartida es el mejor regalo.
Ir al circo en Navidad es más que presenciar un espectáculo: es un momento para desconectar de las pantallas y conectar entre generaciones. Los pequeños descubren un mundo nuevo lleno de imaginación, mientras los mayores reviven la nostalgia de su infancia. Y todo ello acompañado de palomitas, algodón de azúcar y esa sensación de estar viviendo algo especial.
Esta temporada, haz que la magia de la Navidad cobre vida bajo la carpa del circo. Regala a tu familia una experiencia llena de asombro, risas y recuerdos imborrables. Porque el circo clásico no solo es tradición: es una oportunidad para soñar juntos y compartir momentos que perdurarán en el corazón de todos. ¡La función está a punto de empezar, y tú eres el invitado especial!