Buñuelos de viento de cuaresma

Con los buñuelos de viento ahora que se acerca Semana Santa, sorprenderás a tus comensales.

Hoy nuestra cocinera colaboradora, Aurora Flores, nos explica la tradición y como hacer algo exquisito: los buñuelos de viento de cuaresma.

Durante estos días próximos a Semana Santa encontramos en nuestras pastelerías diferentes dulces típicos de esta época. En esta ocasión os enseñaremos a elaborar los famosos buñuelos de viento de Cuaresma. En Cataluña, Madrid y Andalucía es fácil encontrarlos durante estos días, especialmente los miércoles y viernes de Cuaresma. En cambio, en Valencia e Islas Baleares no sólo se asocian a la época de Semana Santa sino también a festividades como Las Fallas de Valencia o fiestas patronales.




Denominamos buñuelos de viento debido a su ligereza y porque en su interior encontramos » hinchadas burbujas de aire»  que explotan en nuestra boca al primer mordisco.

Cada comunidad autónoma introduce diferentes ingredientes en su interior: crema pastelera, nata, chocolate, etc… pero en esta ocasión os hablaremos del buñuelo de viento, que hará las delicias de grandes y pequeños.

ingredientes:

250 ml de agua

30 gr. de mantequilla

200 de harina

4 huevos

50 gr de azúcar

1 pizca de sal

ralladura de medio limón

aceite para freír

azúcar glas

canela para espolvorear

Los buñuelos de viento tienen diferentes preparaciones y productos dependiendo de la Comunidad Autónoma en la que se realicen.

Preparación:

Lo primero pondremos a hervir agua, con la mantequilla, el azúcar y la sal. Una vez hierva se retira del fuego. y echaremos la harina de golpe elaborando mezclando bien y elaborando una masa. Cuando esté bien unido se van poniendo los huevos de uno en uno y que vaya mezclando bien, se deja que repose durante una hora.




Según nuestra habilidad le daremos forma a esa masa con las manos o echando mano de dos cucharas para conseguir la forma redondeada simulando bolas pequeñas.A continuación, pon aceite abundante en una sartén. La dificultad de este dulce reside precisamente en la temperatura del aceite, puesto que si el aceite está frío la masa caería  al fondo, pero si estuviera demasiado caliente se produciría una envoltura alrededor de la masa del buñuelo e impediría que creciera la masa. Para finalizar esta receta tan sabrosa, una vez fritos los buñuelos se polvorea  azúcar glas y  canela sobre ellos. Buen provecho.

Buñuelos de viento que dejarán boquiabierto a tus invitados

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