Sigue la guerra de las protestas: «Tenemos que dejarlo y ya está» El Real Madrid, de uñas contra el colectivo arbitral por las numerosas amarillas vistas
El Real Madrid muestra su descontento con los árbitros. En las últimas jornadas, la discrepancia entre los madridistas y los colegiados no se debe a penales no sancionados o jugadas polémicas. El problema principal radica en las numerosas tarjetas amarillas que los jugadores de Carlo Ancelotti han estado recibiendo de manera sistemática por protestar ante los árbitros.
De las 15 tarjetas amarillas recibidas por el Real Madrid, hasta nueve han sido por protestas. Un porcentaje alarmantemente alto en comparación con la temporada pasada, cuando los blancos solo recibieron 14 tarjetas amarillas de un total de 72 por quejas. Frente al Alavés, Fede Valverde fue sancionado en el minuto 4 en una acción que generó indignación en el Bernabéu desde muy temprano, seguido por Vinicius (quien acumula tres amarillas por protestas en la Liga) y Luka Modric, quien llevaba el brazalete de capitán cuando fue amonestado.
Ancelotti comentó: «Debemos analizar las tarjetas amarillas que estamos recibiendo por protestar». El técnico italiano, quien ya expresó su frustración tras el partido contra el Espanyol debido a las tarjetas amarillas recibidas, hizo autocrítica: «Tenemos que adaptarnos a la nueva norma y punto. Debemos dejar de protestar. Ya sean justas o injustas, tenemos que acatar las nuevas reglas. He expresado mi opinión sobre la excesiva cantidad de tarjetas amarillas mostradas por protestas y nada más».
El Comité Técnico de Árbitros (CTA) advirtió y «aprueba» las tarjetas amarillas mostradas.
Y se planteó como solución interna al problema: «Ahora me toca a mí ocuparme de evitarlo, sin complicaciones. Debemos evaluar el tema de las tarjetas amarillas por protestas y lo resolveremos entre nosotros. Pero le mostré una amarilla al capitán, Modric, quien sí tiene permitido hablar».
La instrucción del Comité Técnico de Árbitros ha sido clara al respecto. ‘No se deben permitir gestos que sean percibidos por el aficionado como una crítica hacia las decisiones arbitrarias’. En resumen, no se tolerará que el futbolista en cuestión se rebele ante las decisiones del árbitro. Tanto entrenadores como jugadores han recibido esta información directamente de los colegiados durante la reunión al comienzo de la temporada.
Los futbolistas lamentan la falta de empatía
En este sentido, es cierto que los árbitros están aplicando estrictamente la instrucción recibida, lo cual ha sido aplaudido por el CTA, aunque los jugadores expresen su descontento, como lo hizo Lucas Vázquez en la zona mixta del Bernabéu: «Creo que están siendo muy rigurosos. Lo ocurrido con Fede hoy es anecdótico; no creo que lo que hizo en el minuto tres justifique recibir una tarjeta. Lo sucedido con Kylian hace unos días fue muy leve. Entendemos que los árbitros quieren establecer límites a las reclamaciones excesivas, pero considero necesario encontrar un punto intermedio».
Lucas Vázquez añadió: «Hemos recibido dos tarjetas sin haber cometido ninguna falta mientras ellos cometieron 10 faltas y no fueron sancionados».
Los jugadores de fútbol se lamentan por la falta de empatía del cuerpo arbitral hacia la difícil situación emocional en la que se encuentran durante los partidos; ellos expresan sus sentimientos con gestos y corazones desbocados. «Todos nosotros en el campo estamos llenos de adrenalina y es importante que los árbitros comprendan nuestra situación y nos calmen un poco. En estos dos partidos se han sancionado más las protestas que las faltas cometidas. Nos sacaron dos tarjetas sin haber cometido ninguna falta mientras ellos cometieron 10 faltas y no recibieron ni una sola tarjeta. Creo que esto es algo que debe ser revisado pero confío en una mejora», reflexionó Lucas tras el encuentro contra el Alavés».
