Se celebran las primarias en Nueva York.
Este pasado martes 19 de abril tuvieron lugar las primarias en el Estado de Nueva York, siendo esta contienda la de mayor calado en décadas. Debido al carácter crucial de estas primarias, los precandidatos se dejaron la piel en los innumerables actos de campaña convocados el pasado fin de semana, puesto que el Estado de Nueva York es el segundo estado del país en cuanto a la cantidad de delegados que se extraen de sus comicios.
El partido republicano consigue el 8% (95) de los delegados totales que se necesitan para la nominación, por su parte el partido demócrata de las primarias de Nueva York saca el 10% (247) de sus delegados. Tanto Donald Trump como Hillary Clinton buscaban medir sus fuerzas con sus rivales Ted Cruz y Bernie Sanders respectivamente, y , de esta manera dar un golpe de autoridad hacia la nominación a la presidencia de sus respectivos partidos… y así ha ocurrido.
En el Partido Republicano Donald Trump partía como favorito, pues sus orígenes neoyorquinos y, el hecho que haya desarrollado parte de su fortuna en la Gran Manzana, unido a la poca simpatía que los neoyorquinos tienen al candidato Ted Cruz tras sus declaraciones poco afortunadas sobre los » valores de Nueva York», pronosticaban una amplia victoria. No fue una clara victoria, sino que el magnate arrasó cual Atila, cosechando el mejor resultado de la historia de un candidato republicano en las primarias de Nueva York, adjudicándose 89 delegados. John Kasich consiguió 3 y Ted Cruz ninguno, todavía se está a la espera de 3 delegados por asignar. Tras el aplastante triunfo Trump lanzó un pulso al aparato republicano «no podréis con nosotros», manifestó ante las posibles maniobras para evitar que sea nominado en una posible convención abierta. Al establishment republicano tras las primarias en Nueva York solo le queda aceptar al millonario o entrar en una guerra interna, opción poco recomendable a estas alturas de las primarias.
En el Partido Demócrata Hillary Clinton partía con una clara ventaja frente a su rival Bernie Sanders, pues la ex secretaria de Estado tiene su residencia fijada en este Estado y lo representó en el Senado desde el año 2001 al 2009. El senador de Vermont aunque nació en Brooklyn apenas ha estado ligado a este estado. Clinton ganó las primarias de Nueva York asignándose 135 delegados, frente a los 104 de Sanders, aún quedan 5 delegados por asignar. Ambos jugaban en un estado favorable al partido demócrata, donde la diversidad racial y los jóvenes son un tanto por ciento elevado del electorado. La ex secretaria de Estado ya se ve como clara ganadora hacia la nominación de su partido con este golpe casi definitivo, aunque su rival no se lo está poniendo nada fácil ya que había ganado siete de las ocho últimas primarias.
En estas primarias de Nueva York, Hillary Clinton (favorita por el establishment demócrata) ganó en el área metropolitana pero Sanders le arañó delegados en la zona norte del Estado de Nueva York… aunque, a estas alturas, parece casi imposible una remontada por parte del senador en las siguientes contiendas.
Superadas las elecciones primarias en Nueva York, falta un pasito menos para llegar a la Casa Blanca y las cartas se van destapando.
