El cuidado dental de nuestras mascotas

Al igual que en los humanos, la boca de perros y gatos está llena de bacterias. Con el paso del tiempo se forma en sus dientes una capa de sarro, que actúa a modo de anclaje para estos microorganismos, dando lugar a la placa bacteriana. Poco a poco se produce una infección que avanza hacia la raíz del diente y aparece gingivitis, la inflamación de las encías. El progreso de la enfermedad conduce a la pérdida de piezas dentales, todo provocado por el mal cuidado dental.

Según el estado en que se encuentre la boca de nuestro animal:

  • Sentirá mucho dolor al masticar (piensa en lo doloroso que te resulta tener una pequeña llaga en la boca), pero tu perro o gato no se quejará. Evitará comer con una parte de su boca o se retirará cuando le toques la cara.
  • Se irá tragando los patógenos que ocasionan infección en sus encías y pasarán al torrente sanguíneo, avanzando por todo su organismo. Las bacterias de la placa tienen una especial afinidad por las válvulas del corazón y es muy corriente que animales con la boca en mal estado padezcan poblemas cardiacos de consideración.
  • Cuando la enfermedad progresa lo suficiente, empezará a perder piezas dentales y pueden aparecer fístulas, entre otras patologías.

Cuidado dental: Si un año de vida de un perro equivalen a 7 humanos, un perro joven de 3 ¡tendrá una boca de una persona que no se ha cepillado los dientes en 21 años! Todos sabemos que eso no es sano…

  • Cuando su perro tiene un problema dental, lo primero que notarás es un aliento terrible cada vez que se te acerque. Puede incluso que tu animal evite que le acaricies la cara, por el dolor que le puede producir.

LLegados a esta situación lo indicado es realizar una higiene dental por ultrasonido. Siempre resulta más sencillo, ético y económico realizar este procedimiento a tiempo, que tratar enfermedades odontológicas y sistémicas más graves más tarde.



Antes de cuidado dental

El procedimiento de higiene y cuidado dental por ultrasonidos se realiza bajo anestesia general, ya que el aparato que se utiliza, al igual que el humano, rocía el diente con agua constantemente para no dañarlo. No es conveniente rascar la superficie del diente con un instrumento metálico, porque eso ralla el esmalte, lo debilita y lo hace más sensible a futuras infecciones.

Una vez realizado el procedimiento, el paciente saldrá 6 horas más tarde con los dientes limpios,

Después del cuidado dental

la boca sana y el aliento fresco. Tu animal comerá mejor, recuperará su vitalidad y estará más sano. Para mantener los efectos de la limpieza dental, tendrás que incorporar algún pequeño hábito diario para el cuidado de los dientes. Lo mejor, sin duda, es el cepillado con pasta especial para mascotas. Pero si te parece complicado ponerlo en práctica, puedes utilizar colutorios para animales disueltos en su agua de bebida o barritas específicas para este fin.

El cuidado dental es una de las mejores inversiones que puedes hacer por la salud y el bienestar de tu mejor amigo.

 

 

 

 

Veterinaria de San José Veterinaris

C/ Gran de la Sagrera 112         08027 – Barcelona

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